Valencia Basket volvió a firmar un triunfo de enorme autoridad competitiva al derrotar al Kosner Baskonia por 89-91 en un final electrizante decidido con una canasta de Kameron Taylor a un segundo del final

El alero taronja culminó una jugada dibujada por Pedro Martínez inmediatamente después de que Khalifa Diop empatara el encuentro y cuando la prórroga parecía el escenario más probable. La victoria rompe la racha de siete triunfos consecutivos de los vitorianos en el Buesa Arena y coloca al Valencia Basket con un balance sobresaliente de 8-1 en Liga Endesa, mientras que Baskonia cae a 4-5.
Primer cuarto: arranque fulgurante taronja y respuesta local
El encuentro inició con un Valencia Basket desatado desde el perímetro: cuatro triples en seis intentos —Badio, Taylor, Costello y Puerto— impulsaron un parcial inicial de 2-12 que obligó a Galbiati a parar el partido. Baskonia, falto de ritmo y fluidez ofensiva, solo encontraba una vía de producción en el estreno anotador de Radzevicius.
La reacción local llegó con energía: el conjunto azulgrana encadenó un 11-2 que devolvió la igualdad al marcador (17-17), coincidiendo con un desplome momentáneo de los porcentajes taronja. Fue un triple de Reuvers —ejercicio de precisión que acabaría siendo su mejor actuación en la competición (18 puntos)— el que cerró el cuarto en 17-20, después de que Valencia sobreviviera a la primera embestida física local.

Segundo cuarto: Howard y Luwawu-Cabarrot cambian la dinámica
El segundo periodo se abrió con un intercambio anotador entre Omari Moore y Markus Howard, que revitalizó un partido incierto para ambos equipos. Valencia Basket gestionaba pequeñas ventajas gracias a acciones individuales de Thompson, Taylor y Moore, hasta que el acierto familiar de Luwawu-Cabarrot volvió a aparecer: dos triples consecutivos voltearon el marcador por primera vez (38-35).
El desgaste acumulado por los taronja permitió a Baskonia llegar lanzado al tramo final. Entre los tiros libres locales y un triple sobre la bocina de Rodions Kurucs, los vitorianos alcanzaron su máxima ventaja justo al descanso (44-39), completando una primera mitad de alternancias y tensión creciente.

Tercer cuarto: Reuvers lidera la remontada y De Larrea golpea en el cierre
La reanudación llegó con otro triple de Kurucs que abrió la mayor brecha del partido (49-41). En un tramo de baja anotación general, Reuvers asumió el peso ofensivo taronja con cinco puntos seguidos, Costello y Taylor completaron transiciones acertadas, y Montero sumó desde el arco para firmar un 0-9 que devolvía el liderazgo visitante.
Baskonia respondió desde el tiro libre con Spagnolo y el omnipresente Luwawu-Cabarrot, recuperando una renta de seis puntos (59-53). Pero el cierre del periodo fue taronja: Sima ajustó desde la personal, Moore conectó desde la media distancia y una antideportiva sobre Montero abrió la puerta al golpe final. En la última posesión, Sergio de Larrea clavó un triple limpio que devolvía a Valencia la delantera antes del acto decisivo (60-62).
Último cuarto: alternancias, expulsiones y una pizarra que vale una victoria
Reuvers inauguró el último cuarto con un alley-oop, pero Simmons y Diakite reequilibraron el marcador. Montero sostuvo a los taronja con un 2+1 y un triple mientras Simmons era expulsado por su quinta falta. El duelo se instaló definitivamente en la igualdad: dos bandejas consecutivas de Luwawu-Cabarrot lo llevaron al 70-70 con seis minutos por jugar.
Valencia llegó a tomar una pequeña renta (72-76, min. 36), pero una falta de Taylor sobre el triple del internacional francés estrechó el marcador desde la línea. Baskonia recuperó ventaja (77-76) con los tiros libres de Diop, justo antes de que Yankuba Sima quedara también eliminado por faltas.
La exhibición anotadora de Luwawu-Cabarrot —17 puntos y liderazgo total en el tramo final— mantenía a los locales con opciones, pero Valencia resistió: Reuvers empató tras sacar una falta en rebote ofensivo, Pradilla convirtió otro rebote en puntos y el partido entró en un intercambio mínimo de posesiones. Diop anotó a falta de un segundo para poner el 89-89 que apuntaba a prórroga.
Pero Pedro Martínez tenía una última palabra: tiempo muerto, pizarra y acción milimétrica. Taylor recibió en el lateral, se elevó con decisión y marcó la bandeja que selló un triunfo de enorme valor competitivo.

Un éxito que reafirma la identidad taronja
Valencia Basket no solo ganó un partido vibrante: lo hizo desde la solidez, la amplitud de recursos, la lectura en momentos críticos y una capacidad emocional que lo sitúa como uno de los equipos más en forma de la competición. Vitoria volvió a ser territorio de gestas, y Taylor, con la última posesión, firmó la página más brillante de una noche que ya es parte de la temporada taronja.





















