El Ayuntamiento de Manises ha aprobado por unanimidad en el pleno ordinario del mes de septiembre un protocolo de medidas y actuaciones en función de los diferentes niveles de preemergencia por fenómenos meteorológicos adversos en el municipio. El objetivo es establecer acciones "claras y técnicas", proteger a la población y minimizar daños materiales.
Después de la dana del pasado 29 de octubre, el Ayuntamiento considera "imprescindible" tener un plan para actuar en función de los diferentes niveles de preemergencia y dar así una respuesta coordinada para que tanto efectivos municipales, como la población en general, sepan cómo actuar, según ha indicado el consistorio en un comunicado.
En este sentido, y tras la aprobación en el pleno municipal, el protocolo se ratificará en los diferentes consejos de participación ciudadana de la localidad para que toda la población sea conocedora.
Este protocolo está basado en la 'Guía de recomendaciones a los ayuntamientos para la toma de decisiones preventivas ante fenómenos meteorológicos adversos' de la Agencia de Seguridad y Emergencias de la Generalitat Valenciana, ha señalado el Ayuntamiento.
El documento determina que el responsable principal de las emergencias en la competencia municipal será el jefe de la Policía Local como oficial de mayor rango o, en su defecto, la persona en quien delegue. Su misión será cotejar información que se recibe en el ayuntamiento ante las diferentes situaciones de emergencias.
El ámbito de aplicación de este protocolo incluirá todos los edificios y espacios públicos del municipio: centros educativos, instalaciones deportivas, parques, mercados, hogares de jubilados y cualquier otro lugar de pública concurrencia.
También prestará especial atención a centros educativos debido a la presencia de menores y las necesidades específicas de evacuación y protección de estos espacios.
Niveles de preemergencia
En este protocolo se contemplan los niveles de preemergencia establecidos por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y GVA 112, los cuales son: verde, sin riesgo (actividades normales, solo vigilancia); amarillo, riesgo bajo o moderado (informar a la población, suspender actividades al aire libre en centros educativos e instalaciones); naranja, riesgo importante (suspensión de actividades al aire libre, posible cierre de centros educativos en zonas inundables o cierre generalizado de centros educativos en caso de que la previsión de precipitaciones fuera superior a los 80 milímetros (mm) por hora o 160mm/12horas y activación de refugios temporales y planes de emergencia), y rojo, riesgo extremo (cierre de centros educativos y espacios públicos, activación de evacuaciones y refugios municipales, suspensión de actividades no esenciales).
En cuanto a las actuaciones "clave" en Manises, se contempla el cierre preventivo o restricción de acceso de instalaciones municipales en niveles naranja y rojo. Se ordenará el cierre de centros educativos en nivel rojo y para nivel naranja se contemplará un posible cierre en centros que estén en zonas inundables o se produzcan lluvias que superen los 80 mm/h, siguiendo las indicaciones del PATRICOVA.
Si el nivel decretado es amarillo, solo se limitarán las actividades exteriores o al aire libre. En caso de necesidad, se habilitarán refugios en el pabellón Alberto Arnal, Centro socio-cultural San Jerónimo y pabellón Luis Vilar.
Por otro lado, el protocolo establece que se trabajará en coordinación directa con 112, Policía, Protección Civil y servicios sanitarios. Y en cuanto a la difusión de avisos a la población, estos se difundirán por varios canales como la web municipal, redes sociales, altavoces y medios locales.
El plan contempla también recomendaciones a la población como revisar viviendas o tener preparado un kit de emergencias (agua, alimentos, linterna, medicamentos, documentos), así como evitar circular en zonas inundables y no usar el coche excepto en caso de fuerza mayor.
Finalmente, las empresas han de adoptar planes de autoprotección y fomentar el teletrabajo en niveles naranja y rojo. En este sentido, los conocimientos y la formación en emergencias "son importantes para que las actuaciones que se lleven a cabo en caso de necesidad sean las correctas", por ello el plan contempla la realización de simulacros en centros educativos y edificios públicos, además de instruir al personal municipal en primeros auxilios, evacuación y gestión de crisis. El protocolo se revisará y adaptará según cambios normativos y experiencias.