El triunfo de Valencia Basket en Atenas no fue cuestión de inspiración puntual ni de un arreón aislado. Los datos del encuentro —los números individuales, colectivos y la secuencia exacta de jugadas del play-by-play— muestran un patrón claro: el equipo de Pedro Martínez fue superior en los apartados que definen el baloncesto moderno
Valencia Basket se impone con un 79-89 en OAKA, destacando en estadísticas clave.
Y esa superioridad se mantuvo en el tiempo, especialmente en los momentos donde se deciden los partidos grandes. Las cifras no dejan espacio para la duda: el ganador fue justo.
Un partido que cambia después del descanso: del 44-38 al 17-27 del tercer cuarto
El primer dato que evidencia el giro:
Parcial del tercer cuarto: 17-27 para Valencia.
El play-by-play demuestra que este tramo no fue producto de un acierto casual, sino de una secuencia ordenada:
Triple de Thompson
Canasta interior de Pradilla
Recuperación de Reuvers que acaba en bandeja de Moore
Triple de Badio
Tiros libres de De Larrea y Sima
Triple de Taylor
Este periodo generó dos evidencias estadísticas:
Valencia pasó a anotar 1,34 puntos por posesión, su mejor tramo del partido.
Panathinaikos bajó a 0,89, su peor registro de toda la noche.
A partir de ese instante, Valencia no volvió a perder la iniciativa en el marcador.
El rebote: la estadística que explica media victoria
El rebote no solo suma posesiones. Define control, ritmo y opciones de segundas jugadas. Y ahí la distancia fue determinante:
Rebote ofensivo:
Panathinaikos: 6
Valencia Basket: 11
Estos 11 rebotes ofensivos del Valencia se tradujeron directamente en:
2 triples en segundas opciones
1 mate de Thompson
1 acción interior de Pradilla
1 falta provocada que terminó en puntos
Producción estimada: 17 puntos generados desde el rebote ofensivo.
Panathinaikos, con solo 6 ofensivos, no pasó de 6 puntos de segunda oportunidad.
En un partido de márgenes cortos, este +11 es casi una sentencia matemática.
La puntería cuando el partido “arde”: Valencia sube al 53% en triples en la segunda mitad
El tiro exterior marcó otra diferencia clara.
Primer tiempo de Valencia: 7/21 en triples (33%)
Segundo tiempo: 8/15 (53%)
Pero los datos no solo miden cuánto, sino cuándo:
4 triples en el tercer cuarto para romper el partido
3 triples en el último cuarto para contener las reacciones griegas
Mientras tanto, Panathinaikos:
Se quedó en un 30% global si se excluye a Nunn y Sloukas
Falló cuatro triples consecutivos entre los minutos 31 y 35, justo cuando podía volver a acercarse
El Excel no deja duda: Valencia anotó cuando había que anotar.
Pérdidas y control de balón: Valencia decide con cabeza fría
Los griegos pierden 4 balones en los 7 últimos ataques importantes del partido.
Valencia solo pierde 1 en toda la segunda mitad.
La estadística refleja disciplina, serenidad y madurez competitiva.
La aportación coral frente a la dependencia local
Valoraciones y producción:
Panathinaikos
Shorts: 19 puntos
Nunn: 19 puntos
Sloukas: 12
El resto: 7 puntos combinados entre cuatro jugadores
Valencia Basket
Thompson: 19 puntos, 6 rebotes, 4 asistencias
Taylor: 18 puntos, mejor +/– del partido
Reuvers, Pradilla, Moore y Sako:
4 triples
5 recuperaciones
8 puntos de segunda oportunidad
El dato clave: Valencia tuvo 6 jugadores por encima de 10 de valoración; Panathinaikos solo 2.
Eso no es una impresión: es una estructura de partido.
Valencia Basket se impone a Panathinaikos en un emocionante partido en OAKA.
La lectura final: la estadística firma el veredicto
Cuando se cruzan todos los datos —play-by-play, tiro, rebote, pérdidas, valoraciones, producción individual, eficiencia por cuarto— aparece un patrón inequívoco:
Valencia ganó los cuartos decisivos
Valencia generó más posesiones eficaces
Valencia tuvo más jugadores determinantes
Valencia controló el rebote
Valencia fue más eficiente cuando la presión era máxima
Panathinaikos dependió en exceso de dos jugadores
El OAKA no pudo sostener al equipo local en la tormenta táctica del tercer periodo
El 79-89 no es una sorpresa. Es la consecuencia lógica de un partido donde los números explican quién fue mejor.
Valencia Basket fue el justo vencedor porque la estadística lo sostiene en cada línea.