La plataforma La Saïdia Comuna ha reivindicado que la Finca Groga, situada en la calle Actor Mora de València, se mantenga para uso residencial y vecinal, y ha alertado de que la última licencia municipal concedida permitiría convertir el edificio en apartamentos turísticos de lujo. La asamblea vecinal ha denunciado que, tras años de presiones a las inquilinas, únicamente cuatro vecinas permanecen en el inmueble.
Proceso iniciado con una licencia municipal 'caducada'
Según La Saïdia Comuna, el origen del conflicto se remonta a noviembre de 2023, cuando el Ayuntamiento de València concedió a la empresa madrileña OVRE SL una licencia de obra vinculada a un cambio de uso del edificio, de residencial a hotelero. El colectivo sostiene que esta autorización se otorgó sin comprobar la existencia de inquilinas con contratos de renta antigua, cuya permanencia estaba protegida por ley.
En ese momento, la normativa municipal impedía compatibilizar actividad hotelera y residencial en un mismo edificio, por lo que, según la plataforma, el Ayuntamiento “incumplió su propia normativa”.
Tras las primeras presiones, la propiedad vendió la finca en 2024 a tres empresas —Matas Aremuns SA, Naves y Tochos SL y Explotaciones Catel SL, con sede en Cataluña—. Las vecinas aseguran que representantes de estas firmas han declarado: “Venimos a València porque en Barcelona ya no se puede”.
En mayo de 2025, y ante la falta de inicio de las obras, las residentes solicitaron formalmente que el Ayuntamiento declarara caducada la licencia de obra y el cambio de uso. La caducidad finalmente fue reconocida a mediados de noviembre, aunque, según el colectivo, el consistorio concedió una nueva licencia para una reforma integral del edificio.
La Saïdia Comuna asegura que este último paso encaja con el plan de la propiedad para alquilar los pisos por más de 2.000 euros al mes, una cifra propia de apartamentos turísticos de larga estancia, para los que no sería necesaria licencia turística específica.
Alertan de más proyectos hoteleros en la Saïdia
El colectivo considera este caso como “paradigmático” dentro del distrito de La Saïdia. Recuerdan la oposición vecinal que paralizó el macrohotel de las Naves de Guatla y advierten de que otros proyectos hoteleros avanzan, como el planeado en Maximilià Thous/Benipeixcar.
La plataforma afirma que ha identificado varios edificios del distrito que habrían pasado por procesos similares de expulsión de vecindario, actualmente en manos de empresas vinculadas al sector hotelero.
Además, denuncian el incremento de bajos turísticos en calles como Visitació y en el entorno inmediato de la Finca Groga, una tendencia que, según apuntan, contribuye a la desaparición del comercio tradicional y al encarecimiento sostenido de la vivienda.
Tres demandas del colectivo vecinal
La Saïdia Comuna plantea tres demandas principales: Que el Ayuntamiento revoque la licencia de obras, que consideran un paso previo a la implantación de apartamentos turísticos; que la Finca Groga recupere su función residencial, ocupada por vecinas del barrio y no por empresas con fines especulativos y que el vecindario se organice para frenar la turistificación y defender el derecho a la vivienda.
El colectivo anima a la ciudadanía a difundir el caso bajo el lema: “Queremos un barrio para quien lo habita, no para los turistas”.
