Las asociaciones de afectados por la DANA -la Associació Víctimes de la DANA 29 d’Octubre y la Associació Víctimes Mortals DANA 29-O- han reclamado al nuevo presidente de la Generalitat, Juanfran Pérez Llorca, que les explique de forma directa y “mirándoles a la cara y a los ojos” los motivos de su petición de perdón durante el discurso de toma de posesión.
La presidenta de la Associació Víctimes Mortals DANA 29-O, Rosa Álvarez, ha señalado que “le gustaría mantener un encuentro con el presidente para que explique exactamente por qué pide perdón, porque las víctimas no lo saben”. Álvarez ha advertido que, a su juicio, el mensaje de Pérez Llorca constituye “un perdón genérico” que engloba a todas las administraciones. Según ha afirmado Álvarez, “acaso él sabe lo que hemos hablado con otras instituciones”.
Durante la toma de posesión, Pérez Llorca ha afirmado que “ni el día 29 ni los días posteriores las administraciones públicas estuvieron a la altura de lo que merecía la sociedad y por eso comienzo esta intervención pidiendo perdón”. El presidente ha asegurado que sus palabras “van más allá de un formalismo institucional” y que deben ser el inicio de “un diálogo y un entendimiento” con las víctimas.
La presidenta del colectivo ha reprochado que, una vez más, no se haga referencia a los días previos a la inundación, cuando “ni hubo previsión ni anticipación”. También ha insistido en que la apertura de una nueva etapa debe ir acompañada de decisiones políticas claras.
Entre las medidas reclamadas, la asociación pide que Pérez Llorca solicite a su antecesor, Carlos Mazón, la renuncia a su acta en Les Corts. Álvarez ha considerado una “ofensa a las familias” que el exresponsable del Consell asumiera una portavocía con retribución añadida mientras continúa siendo objeto de crítica por su gestión durante la emergencia.
El colectivo también reclama cambios en el gobierno autonómico. Álvarez considera “fundamental” la salida de la vicepresidenta y consellera de Servicios Sociales, Susana Camarero, y del conseller de Educación, José Antonio Rovira. La presidenta ha señalado que las palabras de Rovira responsabilizando al director del IES de Cheste fallecido en la DANA, José Martínez Toral, fueron “nefastas e inhumanas”.
Álvarez ha advertido que la asociación “difícilmente” aceptará mantener una reunión con Pérez Llorca si no adopta medidas reales al considerar que “si todo se queda en campechanismo, no es suficiente. Hablamos de la vida de 229 personas”.
Acciones inmediatas y responsables
Por su parte desde la Associació Víctimes de la DANA 29 d’Octubre ha reclamado al Consell “acciones inmediatas y responsables” ante lo que consideran una falta de medidas reales tras el cambio de gobierno autonómico. El colectivo expresa que mantiene sus reivindicaciones “con absoluta firmeza” y detalla tres exigencias principales dirigidas al president de la Generalitat, Juanfran Pérez Llorca.
Según ha expuesto la asociación, “el cese inmediato del Consell en su composición actual, especialmente de José Antonio Rovira, Susana Camarero y Miguel Barrachina” es una condición indispensable para abrir una nueva etapa. Además, el colectivo sostiene que “no puede premiarse con complementos retributivos ni privilegios políticos a Carlos Mazón”, cuya actuación durante la emergencia de la DANA consideran ampliamente cuestionada. A su juicio, “su dimisión y la entrega del acta serían un gesto mínimo de responsabilidad democrática”.
La asociación también reclama que las disculpas públicas del nuevo president se traduzcan en responsabilidades concretas. En palabras de la entidad, “las familias reclaman verdad y ya no pueden soportar más excusas”. En este sentido, denuncian que perciben “discursos vacíos que contradicen los hechos” y expresan su malestar ante lo que consideran una estrategia institucional para “dispersar culpabilidades y eludir responsabilidades”.
El comunicado conjunto firmado por las dos ascociones subraya que las víctimas “no aceptarán que se normalice la impunidad en nombre de la gestión política”, recordando que el dolor de las familias y la pérdida de 229 vidas exige medidas reales “y no palabras destinadas únicamente a la opinión pública”.
