El cuartel de la Guardia Civil de Massamagrell recibió una inesperada entrega cuando un hombre se acercó hasta sus instalaciones portando una granada de mortero que había encontrado en la localidad turolense de Valdelinares. Al parecer, un artefacto explosivo de los utilizados en la Guerra Civil española.
Esta granada fue trasladada por los especialistas para su posterior destrucción en una zona segura. Ante esta situación, desde la Guardia Civil han recordado que estos artefactos no deben ser manipulados y tampoco ser trasladados a sus instalaciones.
Desde la Guardia Civil de Valencia se recuerda la peligrosidad que entraña estos comportamientos y que la forma de actuar ante el hallazgo de algún artefacto explosivo consiste en no tocar, ni manipular el objeto y avisar de inmediato a la Guardia Civil a través del 062.