El Ayuntamiento de El Puig, encabezado por su alcalde Vicent Porta, ha manifestado públicamente su "profunda preocupación" por el largo periodo de tiempo que el Museo de la Imprenta y las Artes Gráficas, ubicado en el monasterio de la localidad, lleva cerrado al público.
La situación, que se prolonga ya durante un año, genera incertidumbre, especialmente en el mes de mayo, cuando tradicionalmente se celebra el acto de imposición de medallas del Senado del Museo y sin que se haya recibido ninguna comunicación clara por parte de la conselleria de Cultura sobre su reapertura o el inicio de las obras necesarias.
El cierre del museo se hizo efectivo el 21 de marzo de 2024, meses después de un pequeño incendio en una sala auxiliar el 25 de octubre de 2023. Aunque el incidente no fue de gran magnitud, se tomó la decisión administrativa de clausurar las instalaciones. Hasta hace poco, la única información visible para los visitantes en la entrada del museo era un simple cartel de la conselleria que indicaba que "hoy está cerrado".
El alcalde Porta ha subrayado su "impotencia y frustración" ante "la absoluta falta de respuesta por parte de la conselleria de Cultura respecto a los plazos para la reapertura del museo". A pesar de algunos anuncios de la conselleria que apuntan a una posible reapertura "a lo largo de 2025", no se ha fijado una fecha concreta ni se ha comunicado al ayuntamiento ningún calendario previsto para el inicio o la finalización de las supuestas obras necesarias, "lo que nos deja en una situación de absoluta incertidumbre e impide ofrecer información a nuestros vecinos y visitantes".
Esta falta de información es especialmente preocupante de cara al mes de mayo, mes en que los miembros del Senado del Museo de la Imprenta suelen celebrar su tradicional imposición de medallas, un evento con una larga trayectoria. Porta ha añadido que "a día de hoy, no sabemos si este acto emblemático podrá celebrarse con el museo abierto".
En la misma línea, la concejala de Cultura del Ayuntamiento de El Puig, Tonica Martí, ha lamentado que "el prolongado cierre del Museo de la Imprenta representa una pérdida cultural inasumible para nuestro municipio". Martí ha subrayado que "es un recurso didáctico y patrimonial clave, no solo para los visitantes, sino para la educación de nuestro alumnado y la puesta en valor de la rica historia de la imprenta valenciana".
El Museo de la Imprenta y las Artes Gráficas no es solo un espacio expositivo; es una pieza fundamental del atractivo turístico y cultural de El Puig y de la Comunitat Valenciana. Sus instalaciones albergan, tal y como reconoce la propia conselleria, una de las mejores colecciones de Europa en su ámbito, con piezas tan valiosas como una réplica de la imprenta de Gutenberg, prensas históricas de los siglos XIX y XX, y obras gráficas de artistas reconocidos como Tàpies, Alfaro o Miró.
Asimismo, el museo pone de manifiesto la relevancia histórica de València en el mundo de la imprenta, siendo pionera en España en el siglo XV y cuna de hitos como la primera obra literaria impresa (Les Trobes), la primera novela o la primera traducción de la Biblia al castellano (realizada en valenciano). Este legado histórico, que el museo contribuye a divulgar, es parte de nuestro ADN cultural.
Con cifras de visitantes que alcanzaron las 15.000 personas en 2023 y 17.000 en 2021, el cierre representa una pérdida significativa tanto para la oferta cultural como para la economía local y el prestigio del municipio.
La situación del museo se agrava al constatar que la conselleria de Cultura todavía no ha adjudicado el servicio de mediadores culturales. Esta falta de gestión implica que no existe actualmente una empresa contratada para organizar y llevar a cabo las visitas guiadas al museo, un servicio esencial para la correcta difusión del patrimonio y la atención a los visitantes.
La preocupación por la situación es compartida por quien fue presidente del Senado del Museo hasta 2023, Enrique Fink, quien ha mostrado su escepticismo ante el anuncio de reapertura sin fecha fija y ha destacado en la prensa el "desapego institucional" y las carencias de mantenimiento que, según sostiene, las instalaciones arrastraban desde hacía tiempo, incluso antes del incidente del incendio.
Desde el Ayuntamiento de El Puig se reitera, por tanto, el llamamiento a la conselleria de Cultura para que "dé una respuesta clara y concreta" sobre el futuro inmediato del Museo de la Imprenta. El alcalde ha concluido que "necesitamos saber si se prevé una apertura próxima, si hay un proyecto de obras definido y cuándo empezarán. La falta de información es inaceptable para un recurso cultural de esta magnitud. Nuestra obligación como gobierno local es defender uno de nuestros principales activos culturales y turísticos y exigir su puesta en valor lo antes posible".
La incertidumbre planea, pues, sobre el futuro próximo del Museo de la Imprenta de El Puig y sobre la celebración de eventos tan arraigados como el acto del Senado, a la espera de un pronunciamiento oficial y de hechos concretos por parte de la administración autonómica.