El Ayuntamiento de Torrent ha anunciado el cierre del Pabellón de El Vedat, que se habilitó temporalmente como refugio de emergencia tras la reciente DANA. Durante los días más críticos, este espacio sirvió como albergue improvisado para numerosas personas afectadas por las inundaciones que dejaron a su paso daños materiales, viviendas devastadas y pérdida de familiares.
Hasta 1.000 personas en este refugio de emergencia
La habilitación del Pabellón formó parte del dispositivo de emergencia activado por el consistorio en colaboración con diversas entidades. Cruz Roja desempeñó un papel fundamental en la gestión de los recursos y la atención a los afectados, así como, numerosos voluntarios que se sumaron al esfuerzo, ofreciendo alimentos, ropa, y apoyo emocional a quienes lo necesitaron en esos duros y críticos momentos.
Agradecimiento a la labor de Cruz Roja
El presidente local de Cruz Roja, Enrique Bea ha informado que tras la estabilización de las cifras de acogidos en los primeros días, en el albergue habilitado en el Pabellón El Vedat ha acogido a 334 personas, cifra que fue reduciéndose al volver algunas personas a sus viviendas, o desplazarse a viviendas de familiares, así mismo y tras las gestiones realizadas por el ayuntamiento se han ido realojando familias en otros centros y soluciones habitacionales. Un total de 38 voluntarios de Cruz Roja han estado asistiendo y ayudando, junto a 4 técnicos y 4 vehículos (un transporte adaptado, un 4x4, un vehículo de apoyo y una ambulancia). Y se han repartido 500 camas e instalado 280 camas. El albergue de Torrent ha sido uno de los once que Cruz Roja ha instalado en la provincia.
Las personas allí acogidas encontraron en el recinto no solo un lugar seguro, sino también servicios básicos como comida caliente, ropa, medicamentos y atención médica y psicológica. Equipos de Cruz Roja, junto con técnicos y personal municipal y voluntarios, coordinaron el dispositivo para garantizar que las necesidades de los alojados fueran cubiertas en todo momento.
Además, de los servicios básicos, se ofreció acompañamiento psicológico para paliar el impacto emocional de la catástrofe, especialmente a los más pequeños. El ayuntamiento ha destacado la importancia de la labor de los profesionales de Cruz Roja, que atendió a personas en momentos tan duros, como el haber sufrido pérdidas materiales y la incertidumbre de no saber cuando podrían regresar a sus hogares.
La alcaldesa Amparo Folgado ha manifestado que “ha agradecido públicamente la colaboración de todos los que contribuyeron a gestionar esta emergencia. Desde los miembros de la Cruz Roja, en especial a Enrique Bea, a los voluntarios, Policía Local y el personal municipal, el esfuerzo conjunto y continuo en tiempo récord ha permitido afrontar una de las peores situaciones que ha sufrido nuestro municipio”.
Folgado ha destacado el papel de todos aquellos, tanto los efectivos de seguridad como el personal de apoyo logístico y sanitario, quienes han colaborado de manera ininterrumpida para brindar una estancia digna y segura a todas las personas que lo necesitaron. Un espacio que fue equipado y gestionado con rapidez, asegurando que los servicios esenciales estuvieran disponibles y proveer de un entorno seguro y de primera asistencia para todos”.