La sección primera de la Audiencia de Valencia ha condenado a un abogado a nueve meses de prisión y al pago de una multa de 2.700 euros por ser considerado autor de uno de los incendios ocurridos en la Devesa de El Saler, concretamente el declarado el 21 de octubre de 2023. Sin embargo, el tribunal ha descartado su participación en otros dos fuegos por falta de "indicios suficientes".
La sentencia de la Audiencia de Valencia considera probado que el acusado, con antecedentes penales no computables a efectos de reincidencia, prendió fuego de forma deliberada a la masa forestal cerca de la Avenida Gola de Pujol sobre las 20:15 horas del 21 de octubre de 2023. El fuego afectó a una pequeña superficie del parque natural de la Albufera y fue extinguido rápidamente por los servicios de emergencia.
La condena se basa en el testimonio "rotundo" de dos testigos que vieron al acusado salir del lugar del incendio justo después de que se iniciara. Estos testigos describieron una "bolita de fuego" y confirmaron que el acusado era la única persona en la zona. También relataron que el acusado se marchó andando tranquilamente a pesar de los gritos de una de las testigos.
Además, otros dos testigos corroboraron que el acusado no siguió un camino lógico hacia su domicilio y que intentó esconderse entre los coches de un aparcamiento.
Por otro lado, la Audiencia no ha encontrado pruebas suficientes para considerar al acusado responsable de otros dos incendios: uno ocurrido horas antes el mismo 21 de octubre y otro el 14 de enero de 2024. El tribunal considera que la atribución de la autoría en estos casos se basa en "meras sospechas" que no desvirtúan la presunción de inocencia del acusado.
La sala subraya la gravedad de provocar un incendio intencionadamente en un espacio natural protegido como la Albufera, próximo a viviendas, a pesar de que la rápida intervención evitó una mayor propagación. En atención a las circunstancias personales del acusado, su profesión de abogado, la naturaleza de los hechos y los perjuicios causados, se le impone la pena de prisión y la multa, además de la obligación de indemnizar al Ayuntamiento de València con 255,89 euros por los gastos de extinción del fuego.
