La plaza de acceso de Bioparc Valencia se ha llenado hoy de compromiso y solidaridad con la celebración del 27º Desfile de perros abandonados. El evento, organizado por la protectora A.U.P.A. (Adopta Un Perro Abandonado) y la Fundación Bioparc, ha congregado a cientos de asistentes en una jornada diseñada para fomentar la adopción responsable frente a la compra compulsiva de mascotas en estas fechas navideñas.

Historias que llegan al corazón
El desfile ha permitido conocer la realidad de canes como Lila, que a sus 13 años ha pasado casi toda su vida en el refugio; Leo, rescatado de una acequia; o Luz, superviviente de un atropello.
Especial mención han tenido los perros del refugio de Modepran, que todavía acoge a animales víctimas de la DANA del 29 de octubre de 2024. Ejemplares como Conde, que sufrió el doble trauma del maltrato y la inundación del refugio de Carlet, han conmovido a un público que ha mostrado gran interés por darles una segunda oportunidad.
Un llamamiento a la responsabilidad
Durante el acto, presentado por la periodista de À Punt Rosa Romero, se ha lanzado un mensaje claro: "un perro no es un juguete". La organización ha insistido en que la adopción debe ser una decisión meditada y consciente, especialmente en Navidad, para evitar futuros abandonos y dar visibilidad a estos animales que, de otro modo, permanecen "invisibles" en los refugios.

















