Jueves Santo. De nuevo el escenario montado en la plaza del Cardenal Benlloch, a un lado de la iglesia, congrega a miles de personas para presenciar la representación de la Pasión en la espectacular Semana Santa de Benetússer.
Así asistimos a la Última Cena, con el lavatorio de pies, la institución de la Eucaristía con el pan y el vino y la salida de Judas para traicionar a Jesús.
Mientras tanto, en el Sanedrín Caifás y Anás se las ingenian para conseguir que la asamblea acuerde prender y acabar con la vida de Jesús. En la escena se sitúa a Nicodemo como su defensor, pero éste termina por irse al ver que todo está comprado para condenar al Mesías.
La siguiente escena nos sitúa en el monte de los Olivos, con Jesús orando angustiosamente y los tres discípulos que le acompañan quedándose dormidos por dos veces. La llegada de los soldados del Templo precipitan los acontecimientos y asistimos al famoso beso con el que Judas identifica a Jesús, así como al incidente de San Pedro al cortar la oreja a uno de los soldados y Jesús sanándole. Por fin se produce el prendimiento.
Se abre aquí un periplo por las calles del centro histórico de Benetússer protagonizado por Jesús, que hostigado, insultado y empujado por los soldados y los fariseos a la luz de las antorchas. Un sobrecogedor realismo envuelve a la escena, brutal por momentos, que lleva a Jesús a dar con sus huesos en el suelo empedrado de la calle varias veces. El silencio que reina en las calles, repletas de personal, encoge el alma mientras el ya maltrecho Jesús llega, entre empujones e insultos, hasta el palacio de Poncio Pilatos, montado frente al Ayuntamiento de Benetússer.
Allí espera a la macabra comitiva otra inmensa cantidad de personas que esperan precisamente a la llegada de Jesús y sus captores. Representa la entrada del Palacio de Poncio Pilatos en Jerusalen, con un gran "SPQR" presidiendo el tímpano sobre robustas columnas. Asistimos en este escenario a un combate entre soldados romanos, que se ejercitan ante la mirada del gobernador de Palestina y sus cargos de confianza. Uno de los contendientes, nos apuntan, es ni más ni menos que la campeona de España de Esgrima en la modalidad de florete. Ahí es nada. "Y es de Benetússer", apuntalan.
La siguiente escena es también de todos conocida. Los sacerdotes del Sanedrín presionan a un huidizo Poncio Pilatos para que aprese y condene a muerte a Jesús hasta conseguir que el gobernador romano acceda a meter al reo en sus calabozos. Mientras, entre el público, la Virgen María contempla la escena con un dolor inmenso difícil de describir.
La representación de este Jueves Santo finaliza aquí. La tradicional procesión cierra los actos, hasta el día siguiente, Viernes Santo, el más importante para la Semana Santa de Benetússer que, año tras año, conquista a más y más visitantes, ávidos de contemplar una magnífica y trabajada versión dramatizada de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo.
Gran descripción de lo que ha sido el jueves santo y preciosa galeria fotográfica de la representación de la semana santa de Benetússer. Gracias