Porcelanas Lladró remontó hoy su actividad con la incorporación de unos 300 empleados que vuelven a sus puestos bajo la fórmula de fijos discontinuos, después de dos meses de inactividad tras hacerse efectivo el Expediente de Regulación de Empleo (ERE), y que estarán trabajando hasta el próximo día 12 julio de acuerdo al calendario acordado entre empresa y sindicatos, según informó hoy la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F).
Estos trabajadores pertenecen a las secciones de pegado, pintura y embalaje, y se unen así a los cerca de 150 empleados, la mayoría del departamento de moldes, que se incorporaron hace tres semanas de forma escalonada para "agilizar la producción hasta que llegaran el resto de compañeros de las otras secciones de montaje".
Desde el sindicato destacaron que la vuelta al trabajo de estos empleados "se ha producido en un ambiente de normalidad" y recordaron que, durante el proceso de regulación de empleo, los trabajadores de la compañía "eligieron, mediante votación, pasar de ser fijos a fijos discontinuos para evitar de esta forma despidos masivos".
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