Unas trescientas personas entre alumnos, profesores y padres han participado en el acto simbólico de entierro de la enseñanza pública. El alumnado del IES Riu Túria de Quart de Poblet portaba un ataúd numerosas pancartas en las que reivindicaban su derecho a estudiar en valenciano y de forma digna. 
Los organizadores de este sepelio también han elaborado un libro de condolencias en el que los afectados han expresado sus sentimientos y reivindicaciones ante la pérdida de la calidad de la enseñanza que se prevé para el próximo curso académico en los centros públicos.
La comitiva partió a las 13 horas del Instituto Riu Túria y se dirigió a la avenida San Onofre, en donde se unieron un gran número de ciudadanos y representantes de AMPAS y centros educativos de los alrededores que también habían sido convocados al acto. También acudieron representantes del Ayuntamiento, como el regidor de Educación, J. M. Campanario. Al paso de marchas fúnebres interpretadas por alumnos del IES Riu Túria, la comitiva se dirigió al jardín donde se ubica la Ermita de San Onofre, donde ha tenido lugar la lectura de un manifiesto tras guardar un minuto de silencio en señal de duelo por la muerte de la enseñanza pública.
Este entierro se enmarca dentro de las nuevas acciones de protesta que pretenden denunciar el aumento del número de alumnos por clase hasta 35 alumnos, la supresión de programas especiales, como el Programa de Diversificación Curricular, la supresión de horas de refuerzo y desdobles del profesorado, la reducción de la plantilla de profesores para atender al mismo número de alumnos, el trato de favor a la educación privada concertada en detrimento de la pública y la supresión de una línea en valenciano.
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