La Generalitat protege 10.000 hectáreas de huerta del área metropolitana como suelo no urbanizable

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La consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador, ha presentado hoy en el Museu de l’Horta de Almàssera el nuevo Plan de Actuación Territorial de Ordenación y Dinamización de la Huerta. Un documento que, junto a la Ley de la Huerta también en tramitación, permitirá no sólo proteger 10.000 hectáreas de huerta sino dotar de los instrumentos legales y materiales a ayuntamientos y agricultores para que trabajar la tierra pueda ser rentable. presentación plan acción territorial huerta (2)

Una estrategia, ha dicho Salvador, la de recuperar la huerta y su cultivo, enmarcada en el nuevo modelo económico y productivo que quiere instaurar el Gobierno del Botánico y que pasa por superar la época de la burbuja inmobiliaria, del poder del ladrillo y de la especulación del suelo que, en los últimos 25 años ha acabado con el 30% de la huerta del área metropolitana de Valencia.

Según ha explicado el director general de Territorio, Josep Lluís Ferrando, el objetivo final es implantar políticas agrarias que hagan viable la huerta y, para ello, se han puesto en marcha dos instrumentos jurídicos de carácter urbanístico. Por un lado, la Ley de la Huerta que es la que contemplará la creación del segundo instrumento y que hoy se presentaba: el Plan de Acción Territorial de Ordenación y Dinamización de la Huerta.

Una herramienta de carácter administrativo que ordenará el suelo de protección agrícola de todos los municipios. Se trata de un estudio en profundidad de todas las tierras afectadas para realizar su ordenación coherente y aplicar diferentes niveles de protección. Con estos diferentes niveles se da el gran logro del plan: que se proteja todo el territorio limitando el crecimiento a necesidades reales y repartiéndolo entre los diferentes pueblos de manera coherente.

El Plan ha sido redactado tomando como base la ingente labor realizada hace más de siete años por los técnicos de la Conselleria que cristalizó en un PAT de la Huerta presentado en 2009 por el Gobierno del PP pero que nunca llegó a someterse a información pública ni entró en vigor. presentación plan acción territorial huerta (1)

A partir de ese documento, se han realizado reuniones con todos los Gobiernos municipales afectados (un total de 40 municipios) en las que se ha dado la garantía de que podrán crecer, no quedarán encorsetados por la protección de la huerta, y podrán permitir que los vecinos no tengan que marcharse a otras poblaciones para encontrar vivienda. Pero ese crecimiento se hará de manera coherente y equitativa. Así, el actual plan incrementa en un 15% la superficie protegida incluyendo zonas que en los planes generales de ordenación urbana de muchos consistorios estaban “en riesgo”.

“El artículo más importante de la PAT es el 42.3 que establece que no habrá recalificación de suelo no urbanizable ni ahora ni en el futuro”, ha declarado Ferrando. presentación plan acción territorial huerta (3)

Para poner en valor la huerta, una vez protegida frente a presiones urbanísticas, se abordarán distintas líneas como implantar una marca propia para los productos de la huerta de Valencia que le otorgue la garantía de calidad y fomentar los puntos de venta de kilómetro cero en cada ayuntamiento: comprar los productos que han sido recolectados esa misma mañana o la tarde anterior.

Pero el ecosistema único que supone la huerta de Valencia permite apostar por otros modelos de negocio aunque siempre complementarios al producto principal: el cultivo. Según ha explicado Salvador, estos ‘usos’ permitidos pasarán por restaurantes, venta de artesanía, venta de los propios productos, etc. Unos usos para cuyo desarrollo la nueva ley de la huerta y la PAT contemplan la creación de un “ente gestor” en el que estén representados la Generalitat, las consellerias de Territorio, Agricultura y Medio Ambiente, la Diputación, los ayuntamientos, las comunidades de regantes, asociaciones, etc.

Este ente se encargará, además, de crear un plan agrario que implante ayudas y acciones necesarias, de coordinar y vehiculizar subvenciones y de garantizar la seguridad de las explotaciones agrarias a través de un cuerpo coordinado de seguridad. “Es más lógico que de la vigilancia se encargue un cuerpo que 42 cuerpos de Policía Local”, explicaba Ferrando.

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