La Canyada contará este verano con diez agentes que se encargarán de la vigilancia de las zonas vegetales del barrio. Dos de ellos, destaca el Intendente General de Policía, Leopoldo Bonías, se han incorporado expresamente para La Vallesa, para incrementar la vigilancia de la masa forestal. Además, aprovechando la caída del tráfico urbano que se produce en las vacaciones estivales, la Policía Local de Paterna trasladará, siempre fuera de las horas punta, a los motoristas del casco urbano para patrullar la Canyada, además de varios vehículos destinados a la vigilancia de la zona. Por otra parte, también cuentan con la colaboración de los miembros de Protección Civil los fines de semana.
La labor fundamental de vigilancia en La Vallesa se efectúa desde la torre de vigilancia. Al agente situado en dicha torre le corresponde el puesto más importante ya que desde esa zona es capaz de detectar las columnas de humo y y avisar por la emisora a los compañeros, que son los encargados de localizar el fuego.
Los agentes tienen desde la torre una visión panorámica del territorio y cuentan con la ayuda de un mapa visual que divide el terreno en diez áreas, para facilitar la localización de los posibles incendios. Entre otros lugares, desde la torre es posible ver Mas de Febo, Ribarroja, San Miguel de Lliria y las colinas de San Antonio.
Esta torre de vigilancia está considerada como un punto de información privilegiado, por ello, desde el área de Promoción, Dinamización Municipal y Convivencia, la teniente de alcalde Sara Álvaro, junto con el concejal de Prevención de Incendios, Jesús Giménez, están llevando a cabo un proyecto para instalar en dicha torre una cámara de visión óptica e infrarroja o termográfica nocturna.
Esta cámara, según explica la teniente de alcalde, servirá para complementar las actuaciones de la Policía Local, pero en ningún caso como sustituta de estas. Para Bonías, esta cámara supone un gran avance en las labores de prevención y extinción de incendios, no solo porque detecta los focos de calor provocados por las masas de fuego, si no también porque detecta el calor que desprende el cuerpo humano, lo que facilitará la detención de supuestos pirómanos.
Según explican desde el área de Promoción, Dinamización Municipal y Convivencia, esta cámara será giratoria y tendrá movilidad autónoma y la posibilidad de ser teledirigida por los agentes que se encuentren en las instalaciones de la calle Llíria, en Paterna. Las imágenes que facilitará la cámara harán posibles actuaciones más rápidas y efectivas. Además, permitirá también hacer la vigilancia de la zona extensiva y mantenerla durante todo el año.
El proyecto está en trámites de contratación, pero al tratarse de un contrato menor se espera que la gestiones se realicen rápidamente. La dificultad de este proyecto recae en la falta de suministro eléctrico de la zona. Desde el Ayuntamiento también han destacado la posibilidad de ampliar el número de cámaras termográficas en los próximos años, una vez comprobado el éxito de la instalación.
En lo que va de verano, el parque forestal de La Vallesa ya ha sufrido dos incendios, ambos, según destaca el Intendente General, provocados intencionadamente por pirómanos. El último fue el pasado 13 de junio, que comenzó en el término municipal de Paterna y se propagó por Ribarroja. La Guardia Civil publicó la pasada semana el retrato robot del presunto pirómano que lo provocó. Los efectivos policiales desplegados por La Canyada están ya buscando al sospechoso por las inmediaciones de la zona.
