Agentes de la Policía Local de Burjassot han detenido esta mañana a un hombre de 56 años que portaba un arma cargada, una pistola de la que se desconoce su procedencia, tras acudir a una llamada de socorro que ha realizado un menor desde su domicilio al ver entrar a este hombre.
El menor se ha refugiado en la habitación y ha llamado a la policía desde allí, oportunidad que ha aprovechado el adulto para encerrarlo en la habitación desde fuera.
En la vivienda también se encontraba en ese mismo momento la madre del menor. Al parecer, el agresor ha entrado a la vivienda con el arma tras una discusión familiar y en visible estado nervioso.
Los agentes han acudido rápidamente a la llamada de socorro y han tenido que forzar la puerta de entrada a la vivienda que intentaba abrir la mujer, ante la oposición del hombre.
En ese momento se ha producido un forcejeo al intentar éste sacar el arma que portaba en una riñonera. Como consecuencia del forcejeo han resultado heridos leves dos agentes y el propio agresor que ha sido trasladado posteriormente junto con los agentes al ambulatorio.
Una vez reducido el hombre, los agentes han solicitado la presencia de un miembro de las GAG (Grupo contra la Agresión de Género) para que atendieran a la mujer. La rápida actuación de los agentes y del menor ha evitado hoy en Burjassot un posible acto de violencia de género.
Según han informado agentes de la Policía Local, el detenido va a ser imputado de cuatro presuntos delitos: violencia de género, tenencia de arma prohibida, detención ilegal de un menor, y atentado contra agentes de la autoridad. El detenido ha sido puesto a disposición judicial.
