Los vecinos que no recojan los excrementos de sus animales domésticos podrán ser sancionados con multas de hasta 600 euros. Esta nueva normativa municipal está siendo dada a conocer por los agentes cívicos de Aldaia con motivo del inicio escolar y la campaña de concienciación que está llevando a cabo el Ayuntamiento de Aldaia.
La campaña municipal pretende transmitir buenos hábitos de conducta a la ciudadanía con el objetivo de conseguir una ciudad mucho más cívica.
A tal fin, los agentes están repartiendo a los propietarios y propietarias de estos animales unas bolsas de plástico para poder recoger sus excrementos, al mismo tiempo que les hacen entrega de una hoja informativa donde se recoge la nueva ordenanza municipal que indica que quien no atienda a esta medida cívica será multado por un importe de seiscientos euros.
Los agentes cívicos, que dependen de la Policía Local de Aldaia, se encargan también de recoger cualquier opinión de los ciudadanos para trasladarla a la autoridad correspondiente. Dos de ellos se encargan de la zona de la huerta y los campos, mientras que otros dos vigilan parques y calles de la ciudad.
