El Partido Popular de Torrent ha denunciado hoy que “los vecinos del casco antiguo llevan casi cuatro meses sufriendo la incomodidad de las obras en la calle Santo Tomás que les impide acceder al centro, pero sobre todo a los vecinos de la calle y quienes aparcan sus vehículos en la zona”. Las obras comenzaron tras la Semana Santa, en marzo, y a mitad de julio, la calle Santo Tomás todavía sigue cerrada al tráfico.
Sobre el terreno, los populares han comprobado que “se están ejecutando las obras en tres calles al mismo tiempo, Santo Tomás, Andorra y Almería, cosa que está ralentizando la ejecución de las obras y perjudicando a todos los vecinos de dichas calles, cuando deberían de haber hecho una detrás de otra”.
Los populares recuerdan que en estas calles existen varios accesos a garajes privados y a un gran garaje público que ha tenido que modificar su entrada por la calle José Navarro, “trastocando su rutina diaria, ya que incluso ese garaje ha tenido que reducir su horario de apertura”.
“La calle Santo Tomás es la principal vía de acceso al Centro Histórico de Torrent desde la Avenida al Vedat y Gómez Ferrer, teniéndose que desplazar ahora hasta la calle Virgen de la Purificación y Padre Feijóo”, explican los populares quienes recalcan que “son obras necesarias y que en su día el PP en el gobierno incluyó en el Plan de Barrios pero, no es posible que estas obras duren más que las de la calle Valencia hace dos años”.
La calle Santo Tomás mide 170 metros de longitud y lleva cuatro meses cerrada mientras que la reurbanización integral de la calle Valencia duró 11 meses siendo de 750 metros de longitud. Para los populares “las obras en la calle Santo Tomás tendrían que haber durado solamente dos meses y medio pero llevamos cuatro en obras”.
Por eso, los populares apremian al gobierno municipal a “acelerar todo lo posible las obras que están perjudicando tanto a los vecinos de la calle Santo Tomás y alrededores”, además, recuerdan que “en unos días muchas calles del Centro Histórico estarán cerradas al tráfico por la celebración de las Fiestas Patronales y si la calle no está abierta puede convertirse el Centro Histórico en una ratonera”.
